Mucho se habla de la Ética Profesional, citarla, implica hacer lo correcto aquí y ahora. Pero, ¿Realmente nos podemos percatar que la ética está en todos lados?.

Ser éticos es hacer lo correcto siempre, sin embargo a penas surja una oportunidad a nuestro favor, seguro pensaremos en tomar ventaja. El mundo en general atraviesa por la más grande crisis de valores, en algunos de estos me atrevo a asegurar que los hay “en peligro de extinción”. Sabemos además que más que un tema por solucionar en nuestra sociedad, es inherente a nosotros mismos. Antes que podamos juzgar, criticar y penalizar a los demás, nos sentimos con la autoridad y convicción de que actuamos correctamente.

Un ejemplo muy claro de nuestro país, “Ir por el hombro”. Fíjese, físicamente las autopistas y corredores tienen la opción muy tentadora de que evaluemos lo siguiente: Con este tranque quedarme en el carril que va lento, teniendo un espacio de libertad en donde mi paso será expedito a una velocidad mayor, ¿por qué no irme por el hombro? Es más, todos lo hacen, el que no lo hace es porque quiere pasar más tiempo aquí, sin mencionar el costo de combustible que implica. Para algunos esto significaría la clásica práctica del juega vivo, pero lamento informarles que no, no es jugar vivo, es falta de ética. Y por otro lado, están los que van en los paños normales, estos dicen: ojalá esté un policía o un obstáculo por delante y al verse en aprietos con la “ley o situación” tengan que regresar al carril normal de circulación y allí no les dejaremos pasar para que aprendan. Estos otros personajes en ese momento no estarán tentados de ir por el hombro; pero en cuanto les llegue la oportunidad, según ellos sin que nadie los vea o los identifiquen lo harán. Verifique además que cualquiera de las dos situaciones se ve implicado tomar un riesgo en contra de sus propios intereses. Y aquí está la palabra mágica, la ética en la práctica va de la mano con los intereses de cada uno de nosotros. Y esto ha tomado la forma de una herramienta más que utilizamos para sobrevivir. Les invito a analizar cada uno de los conceptos señalados en este escrito, pregúntense como en cada uno de ellos nos comportamos. Estos sería un gran paso para mejorar y ser más éticos en la práctica.

Por: Psic. Verónica Martínez
Trainer de Talento Y Desarrollo Humano
y Gerente de Proyectos de Business Institute of the Americas.